lunes, 8 de mayo de 2017

Conclusión


Para finalizar este pequeño blog, me gustaría hacer un pequeño análisis acerca del desarrollo del mismo, al igual que una crítica constructiva del mismo.
Lo primero de todo, el desarrollo de este blog ha sido muy satisfactorio a la vez que laborioso, ya que he intentado recoger una pequeña síntesis de los temas vistos en clase, al igual que aportaciones personales acerca de los temas que me han parecido interesantes o de artículos que he encontrado por internet y me ha parecido conveniente comentar.
Creo que el “método de crear un blog” , para el alumno al principio puede ser un poco “asustadizo” o “trabajoso” porque, como ya he dicho anteriormente, es un trabajo continuo que se tiene que realizar a lo largo de todo el cuatrimestre, pero a la larga es muy bueno porque nos ayuda a nosotros, como alumnos, a reflexionar sobre nuestro propio aprendizaje, pudiéndolo asemejar a lo que es un portafolio electrónico, pero con la diferencia es que compartiendo la dirección URL todos los estudiantes podemos acceder a la dirección del blog de cada uno de nuestros compañeros y compañeras, y podemos compartir información, puntos de vista diferentes, al igual que noticias de actualidad que nos puedan interesar. Este blog también es una herramienta muy útil para el profesorado, dónde aquí puede observar el trabajo del alumno y evaluar si realmente ha captado los contenidos mínimos que se requiere para pasar la asignatura y de las opiniones personales de cada uno de sus estudiantes.

Por todo esto, creo que ha sido una muy buena herramienta de aprendizaje, donde plasmar todo el trabajo realizado durante todo el curso y ser una ayuda para futuras búsquedas relacionadas con el mundo de la educación y la pedagogía.

5. USO DE ROBOTS EN LA EDUCACIÓN INFANTIL Y PRIMARIA

Durante el transcurso de esta asignatura, hemos podido ver diferentes temas relacionados con la pedagogía, al igual que hemos visualizado varios vídeos donde se trabajaban con diferentes metodologías de enseñanza, pero sin duda alguna algo que me ha llamado la atención y que me ha resultado de las cosas más interesantes a lo largo de este cuatrimestre ha sido el trabajo que hemos estado realizando con los robots.
Antes de cursar esta asignatura, todo lo relacionado con el mundo de la programación de robots y cosas del estilo nunca lo hubiese conectado con el mundo de la educación primaria ni infantil.
Nunca hubiese imaginado la gran variedad de robots para poder trabajar con ellos en los coles y el gran abanico de posibilidades y alternativas para poder hacer llegar a nuestros alumnos y alumnas los contenidos que queramos trabajar a la vez que aprenden y se inician en el mundo de la programación. Robots como el Dash, que recibiendo unos patrones de dirección, puedes llevarlos donde tú, pueden servir para trabajar con este tipo de robot en las clases de infantil como en los primeros niveles de primaria para que puedan programarlo sobre una alfombra con diferentes cosas (dependiendo si quieres trabajar con los números, frutas, colores…) y hacer que el robot vaya a la casilla donde se encuentra el objeto deseado, u otro ejemplo de robot puede ser el Makey Makey, para niños más mayores, donde puedan crear hasta su propio tablero de juegos, donde puedan crear sus propias preguntas interactivas, dependiendo de la temática que quieran trabajar. Esto lo pueden realizar muy fácilmente con un ordenador y con el programa Scratch. El hecho de que ellos mismos puedan construir su propio juego y crear sus propias preguntas, a la hora de jugar creará en ellos una mayor motivación por ver que es algo que han realizado ellos mismos, y podrán divertirse a la vez que aprenden mucho más, siendo su aprendizaje mucho más significativo que el de una clase magistral, por ejemplo.
En definitiva, creo que el uso de este tipo de aparatos dentro de nuestras aulas creo que es un muy buen método de enseñanza para nuestros chicos y chicas, porque es un modo de llamar la atención y ya jugar con un hándicap a nuestro favor a la hora de presentar el contenido que queramos trabajar.

sábado, 6 de mayo de 2017

• Proyecto de mediación

Como he comentado anteriormente, en mi colegio se está llevando a cabo un proyecto de mediación. Numerosos maestros y maestras me han hablado de él y la verdad pienso que ha sido una muy buena decisión instaurarlo ya que se están viendo resultados muy buenos al poco tiempo de ponerlo en marcha. Este proyecto trata de mejorar las relaciones entre iguales y aprender a afrontar los diferentes conflictos que puedan surgir en las aulas desde un modo crítico y a través del diálogo, y sin tener que intervenir el profesor o profesora para solucionarlo.
Este proyecto consiste en seleccionar dos personas de 6º de Primaria, de los más mayores del colegio, que serán denominados los mediadores de la semana. Durante la semana que les toque ser mediadores, tendrán que intervenir en cualquier conflicto que se pueda dar dentro del colegio, desde infantil hasta primaria, siendo los encargados de “mediar” y de conseguir que se resuelva dicha “riña” entre sus compañeros y compañeras, sin necesidad de tener que acudir a los profesores para que intenten solucionarlo ellos. La base para intentar abolir dichos conflictos será a través del dialogo entre ellos, la comunicación y el saber reconocer cuando uno lo hace bien o lo hace mal. En el caso de que la discusión sea muy grande y no sean capaces de solucionarla, será cuando se avise a los profesores para que ellos pongan paz entre ellos.
De este modo, podemos fomentar lo primero una competencia lingüística entre ellos, ya que tendrán que expresarse para contar lo que les ha pasado, y los mediadores tendrán que dar su punto de vista objetivo acerca de la situación que tienen que intentar resolver, al igual que tendrán que tener un pensamiento crítico a la hora de evaluar la situación y buscarle la mejor solución a través del dialogo. Por otro lado, también se fomentará la competencia social y cívica ya que tendrán que convivir como sociedad pacífica y buscar soluciones a los problemas que surjan.

En definitiva, creo que es muy buen modo de fomentar la buena convivencia entre ellos y de intentar adquirir un buen clima de aula y de colegio, todo ello trabajado entre ellos, con la mínima interacción del profesor.

4. LA CONSTRUCCIÓN DE LA CONVIVENCIA ESCOLAR

La escuela, como ya sabemos, es una institución educativa, dónde la sociedad tiene mucho que ver dentro de la misma. Es una formación social bidireccional: está formada a partir de la sociedad en la que se desarrolla y ésta es un reflejo de la sociedad en la que se da. Por este motivo, las diferentes crisis sociales que se puedan dar en nuestra sociedad, va a tener su repercusión inmediata dentro de nuestras aulas. La función socializadora de la escuela se manifiesta en las interrelaciones que se puedan dar dentro de la misma, ya sea entre alumnos, profesores, entre alumno y profesor… Para ello, numerosos centros escolares han llevado a cabo muchos proyectos para intentar mejorar la convivencia dentro del aula. Uno de estos proyectos que intenta fomentar este ámbito y que actualmente se lleva a cabo en el colegio donde estudié de pequeño es el proyecto de mediación, el cual está teniendo muy buena aceptación y está obteniendo muy buenos resultados. Desde mi punto de vista, creo que el fomento de un buen clima de aula y del respeto entre iguales es uno de los principales puntos a tratar dentro de las aulas, porque todo este tipo de conductas se verá reflejada en la sociedad actual y futura, porque todo lo que aprendan dentro de las aulas y dentro de las casas propias de cada uno, se verá reflejado posteriormente en nuestro día a día como seres sociales.

• ¿Nota o categoría?

Otros de los puntos a tratar que veo que es importante es el siguiente. Desde hace mucho tiempo y actualmente, nuestro modo de evaluar es el hecho de tener un número: un 4, un 5, un 8… Si nos vamos por ejemplo a las clases de Educación Física, donde se realizan las actividades del Coursse Navette, test de Cooper… Donde tenías que dar x vueltas o periodos para llegar al cinco, y unas cuantas más para obtener un diez, ¿acaso creemos que ese tipo de evaluaciones son “correctas”? Porque desde mi punto de vista creo que no. El hecho de evaluar no significa únicamente ver si ha llegado al “corte” exigido para ver si esa persona merece un cinco o un ocho.

Pongámonos en la situación de una clase de primaria, en la asignatura de educación física por ejemplo. Toca realizar el test de Cooper, y en clase tenemos el típico chiquitín gordito y por otro lado el chico que juega al fútbol, que le encanta el deporte. El gordito no llega al mínimo de vueltas requeridas para llegar al cinco, pero se ha esforzado todo lo que ha podido, ha estado dando vueltas hasta el último aliento que le quedaba. El profesor le pone un 4, prueba no superada, mientras que el chico atleta realiza las vueltas tranquilamente, sin mucho esfuerzo y alcanza el número de vueltas estipulados para conseguir la mejor nota, el 10. ¿Cómo podéis pensar que se sentirá ese chico que ha sacado un cuatro y ver que se ha dejado todo en la pista? ¿Creéis que se ha sido justo con él al “categorizarlo” entre los peores de la clase a pesar de su esfuerzo? Desde mi punto de vista, creo que ese tipo de evaluaciones han quedado un poco desfasadas ya, porque no sólo se debería mirar el número de vueltas que esa persona haga, sino que se debería valorar también las capacidades que cada uno tiene, el esfuerzo que se pone al realizar dichos ejercicios, etc… 
Como ya sabemos, la evaluación es individual y debe tener en cuenta la integridad de cada uno de nuestros alumnos y alumnas, no podemos poner a todos la misma meta sabiendo que cada uno de ellos es un mundo diferente, y menos marcar a un muchacho y categorizarlo con una nota que recoja únicamente lo que pueda plasmar en una prueba o en un examen, sino que sea una evaluación de todo el proceso que realiza desde que empieza hasta que acaba la asignatura.
Para terminar esta entrada, me gustaría acabar con una imagen que refleja a la perfección lo que muchas veces se vive en nuestras aulas a la hora de evaluar o calificar a los estudiantes. 


• La escuela del futuro.

El siguiente punto que me gustaría tratar lo he titulado “La escuela del futuro”, y lo voy a tratar tras la visualización de una de las conferencias de Sugata Mitra que la denominó “Construyendo una escuela en la nube”. 
Si nos centramos dentro de las aulas, ¿Cuál debe ser el papel del docente dentro de la misma? ¿Debe ser el centro del aprendizaje de los niños y niñas? ¿Es el que pone las directrices a seguir? ¿Mero observador? Al ver el vídeo, me ha resultado muy curioso el experimento que realizó el ponente denominado “agujero en la pared”, ya que los chicos y chicas de Nueva Delhi, los cuáles no habían usado nunca ningún tipo de ordenador, al dejarlos un par de horas o días con él, ya eran capaces de utilizarlos sin que nadie les hubiese explicado nada, con el simple hecho de habérselo dejado para que ellos lo usaran y lo trastearan. Este hecho, nos lleva también a pensar cuando, la gente de hoy en día, se compra algún aparato electrónico. ¿Qué porcentaje de personas se leen el libro de instrucciones a la hora de poner en funcionamiento dicho aparato como un móvil, tablet, ordenador…? ¡Es prácticamente nulo! Cuando tenemos un objeto del estilo en nuestras manos, tenemos la convicción de que aprenderemos a usarlo únicamente toqueteándolo, sin tener que recurrir a ningún manual o a alguien que nos explique para que sirve un botón u otro. 
Si tenemos en cuenta lo comentado, ¿por qué dentro de las escuelas nos obsesionamos en que tenemos que explicarles a los niños y niñas TODO sin poder darle un poco de autonomía para que puedan descubrirlo por sí mismo? ¿Acaso no son lo suficientemente autónomos para descubrirlo por su propio motivo? Desde mi punto de vista, creo que la concepción de enseñanza está un poco anticuada por este motivo, estamos empecinados en que tenemos que darle a nuestro alumnado todo explicado, todo mascado para que posteriormente puedan trabajar con ello, en vez de dejar que ellos mismos descubran como se hace cada cosa. Ya sea de forma autónoma o por grupos cooperativos, serían lo suficientemente autónomos como para alcanzar las expectativas que nosotros les pusiéramos, ya que ellos son el verdadero eje del aprendizaje, ellos son los que tienen el poder de adquirir esos conocimientos y quedárselos para ellos. El aprendizaje por descubrimiento será mucho más significativo que el aprendizaje mediante una clase magistral, ya que ellos mismos se sienten participes de este aprendizaje, y tienen una mayor motivación a la hora de afrontar las tareas que les sean propuestas, siendo nuestro papel el de guiar el aprendizaje y darle facilidades para que éstos lo puedan alcanzar, al igual que entre ellos se va a fomentar la cooperación y la ayuda, porque va a crear un vínculo mayor y cuando uno tenga dificultades, su compañero le ayudará a que alcance los conocimientos previstos. Y como se dice, uno realmente a entendido algo cuando es capaz de explicárselo a otra persona.

• Pedagogía tóxica.

Tras haber leído el artículo “Profesoras contra la pedagogía tóxica”, y reflexionado con respecto a él, he llegado a varias semejanzas en mi pensamiento, un punto de vista muy similar al mío, y que me gustaría tratar a continuación. Podemos abordar la lectura del siguiente artículo con la pregunta que nos hacemos: ¿por qué el sistema educativo no ha cambiado? Si analizamos la actualidad de la educación en nuestro país, podemos observar que no ha cambiado apenas. Lo único que hemos hecho ha sido el fomento de las TICs como complemento a lo que ya teníamos, no de un modo innovador. Nuestra educación se basa en la clase magistral donde el o la docente se encarga de explicar los contenidos del currículo a la espera de que el alumnado los memorice para luego plasmarlos en un papel. Mientras que otras disciplinas han ido mejorando e innovando en sus herramientas, ¿por qué la educación se ha quedado estancada en el siglo XIX, sin ningún síntoma de avance? La sociedad avanza y crece, y dado que la educación es una de las armas más poderosas para cambiar el mundo, no podemos dejar que ésta no innove y no se amolde a las necesidades de nuestra sociedad. 
Entrando ya a lo que el artículo se refiere, me parece muy interesante la propuesta que cuentas las dos profesoras anteriores con referencia a su metodología desarrollada: el Art Thinking. ¿Qué mejor modo de suscitar la curiosidad del niño o niña o la motivación en el aula realizando acciones que “se salgan de lo normal”? La monotonía que supone que entre el profesor o la profesora, mande abrir el libro y comenzar con la clase día sí y día también hace que nuestro alumnado se acabe cansando y pierda interés con respecto al contenido propuesto. Si ese contenido, de primeras, se lo hacemos llegar de un modo llamativo y que capte desde un principio su atención, tendremos ese hándicap a nuestro favor a la hora de hacer frente al proceso enseñanza/aprendizaje, y creando en nuestra clase un aprendizaje significativo.
Para finalizar, tenemos que intentar erradicar la idea errónea, desde mi punto de vista, de que el profesor o la profesora es el eje principal del aprendizaje porque nosotros somos los que transmitimos los conocimientos a nuestros chicos y chicas, y saber que el verdadero centro de la educación gira con respecto a nuestro alumnado, siendo nosotros su “guía” en este proceso tan bonito y a la vez complicado como es el de educar.